Teaxul diseña un equipo para eliminar el anisakis del pescado que se tira al mar

No es química todo lo que contamina el mar y los bancos de pescado. Lo saben bien los pescadores al arrojar al mar las vísceras y otros restos de pescado que por la descomposición registran anisakis, y que a su vez sirven de alimento para las especies del banco pesquero.

Para buscar una solución al problema de la contaminación de los caladeros europeos e implantar sistemas de pesca responsables con la preservación del medio marino, la Cooperativa de Armadores de Vigo, a través del departamento de innovación, ha desarrollado, con la empresa viguesa Teaxul, un sistema que elimina el parásito y garantiza la descontaminación total de los restos de pescado.

Julio César González, propietario de la empresa dedicada a la técnicas electrónicas aplicadas, y Jorge Romón, de Arvi, presentaron ayer el equipo que en la actualidad se encuentra en pleno proceso de pruebas dentro del pesquero Nuevo Mugardos, que faena en aguas del Gran Sol.

Dos años y medio de investigación han sido necesarios para desarrollar el prototipo que, basado en el uso del ozono, incorpora, según Julio César González, una fórmula propia que garantiza que todos los residuos orgánicos de los barcos pesqueros vuelven al mar descontaminados. Explica que entre las aplicaciones del nuevo equipo también se encuentra la limpieza de las bodegas de los barcos para garantizar la eliminación de los residuos de la pesca.

Para desarrollar la investigación han contado con una subvención de 200.000 euros de la Secretaría General del Mar. Uno de los problemas que se anticipan en la instalación de los nuevos equipos es su precio, según reconocen tanto Julio César González como Jorge Romón, ya que por ahora el precio es de 72.000 euros para cada barco